domingo, 6 de junio de 2010

100 años...y aquí estamos.




Este año se celebra el centenario del comienzo de las obras de la construcción de esta arteria principal del centro de Madrid.Las obras comenzaron por fin el 4 de abril de 1910 (después de unos largos años pensando en cómo hacerla), con la presencia del alcalde, José Francos Rodríguez, el presidente del gobierno, José Canalejas, y la familia real encabezada por el rey Alfonso XIII, lo cual da idea de la importancia que se dio a la obra en su época.Nombres a lo largo de la Historia



A lo largo de su historia, la Gran Vía ha tenido diversos nombres oficiales, y también otros populares. En un primer momento, su construcción se dividió en tres tramos, que fueron dedicados a sendos personajes relevantes de la época. La Avenida A se llamó calle Eduardo Dato; el Bulevar, avenida de Pi y Margall y la Avenida B, calle del Conde de Peñalver.Tres meses antes de comenzar la Guerra Civil, en 1936, los dos primeros tramos pasaron a denominarse Avenida de la CNT. Ya en tiempos de la Guerra, serían conocidos como Avenida de Rusia. Este nombre volvería a cambiarse en noviembre de 1937 por el de Avenida de la Unión Soviética, colocándose una placa conmemorativa de piedra con los escudos de la II República Española y la Unión Soviética y el texto "Homenaje de los amigos de la URSS", en un claro ejemplo de la dictadura del proletariado que querían instaurar en España los "defensores de las libertades".Durante este período también tuvo otros nombres populares como Avenida de los obuses o, la zona del bulevar, Avenida del quince y medio, en referencia a los proyectiles que el ejército franquista lanzaba sobre los pisos superiores del edificio de la Telefónica, que era usado como observatorio militar. En 1937 el tramo llamado Eduardo Dato recibió el nombre de avenida de México.Al finalizar la Guerra Civil en 1939, con la victoria nacional y su entrada en Madrid, la calle pasó a llamarse desde el 24 de abril Avenida de José Antonio, en homenaje a José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange Española. También se denominó de igual forma la estación de metro de Gran Vía.En 1981, durante la Transición Española y siendo alcalde de Madrid el socialista Enrique Tierno Galván, el Ayuntamiento cambió el nombre de veintisiete calles, entre ellas el de la Avenida de José Antonio, que desde entonces se denomina, por primera oficialmente, simplemente Gran Vía.



Reflejo de la sociedad moderna
En la actualidad es una de las vías mas transitadas y concurridas de la capital de España. Lo que antaño fueron cines se han transformado, la mayoría, en tiendas de grandes firmas comerciales y sólo alguno han conseguido salvarse del consumismo atroz transformandose en teatros y ofreciendo musicales.

Lo que por el día es trasiego, compras y claridad se transforma al oscurecer en lo más corrupto de una ciudad. A lo largo de su kilometro trescientros metros se concentran todos los claro oscuros que las ciudades modernas pueden ofrecer, al cierre de las tiendas y a la finalización de las funciones teatrales una verdadera fauna va tomando posiciones a lo largo y ancho de la Gran Vía y de sus calles adyacentes.

Realmente podemos encontrarnos de todo, a pesar de estar flanqueada por varias comisarías de policía y de tener una presencia policial continua o de realizarse celebraciones llenas de glamour, cuando decimos de todo es todo y de lo cual enumeraremos algunos de los casos mas flagrantes y conocidos: prostitutas de todo tipo y condición, prácticamente todas de fuera de nuestras fronteras; indigentes abandonados a su suerte por un sistema para el que son invisibles; menudeo y tráfico de drogas de todo tipo y ofrecidas en las lenguas más dispares; ladrones y carteristas a la espera de presas fáciles; jóvenes, y no tanto, que deambulan a lo largo de sus aceras embriagados por todos los "néctares" que le ofrece el sistema; inmigrantes desorientados ya sea a la busca de la vida o de turistas perdidos en la inmensidad de la ciudad; orientales ofreciendo comidas sin el más minimo certificado de sanidad o vendiendo alcohol junto a un coche policial y a escasos 100 m. de una comisaría, que hacen la vista gorda en nombre de la multiculturalidad; rastros de aceite en dirección a esa zona tan de "moda" conocida como Chueca; lanza-flechas rodando por las aceras o rebotando por las paredes; bakalas, pokeros, siniestros, raperos, grunges, pijos, rastas, hippies, heavys, punkys, skins,... camino a la cola de cualquier garito que se encuentran en las proximidades de esta Gran Vía para si el machaca de turno tiene a bien dejarles pasar; y un largo etcétera que sería casi imposible enumerar.

Curiosa vía de la que se celebran 100 años y que a pesar de todo pertenece a nuestra querida ciudad.

Madrid, Villa y Corte.
-Extraído de Madrid Anti Antifa.

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